Este año el Orfeón contará con un puñado de maestros pertenecientes a esa generación de directores de orquesta que combina la energía desbordante de la juventud con la madurez propia de una experiencia profesional ya consolidada internacionalmente y que conducirán al coro en varios de los 18 conciertos que hasta la fecha se han programado para 2019. Así, Pablo Heras-Casado, Iñigo Pírfano, Jonathan Nott, Daniel Harding y Karl-Heinz  Steffens dirigirán a los orfeonistas, además de los asiduos SokhievGergiev.

Habrá dos salidas internacionales con tres conciertos en París y un cuarto en el Festival de Berlioz que se celebra en Côte Saint-André, la ciudad natal del compositor francés.

Tres conciertos en la Philharmonie de París

El Orfeón acudirá en febrero a la Philharmonie, el auditorio parisino que tuvo el honor de inaugurarlo en 2015. Ante 2.400 personas ofrecerá tres conciertos: El día 17, con la Filarmónica de Múnich y su coro, bajo la dirección de Valery Gergiev, titular de la orquesta, interpretará la Sinfonía nº 8 de Mahler; los días 20 y 21, a las órdenes de Pablo Heras-Casado abordará el Réquiem de Berlioz junto a la Orquesta de París y su coro, más la Orquesta del Conservatorio de París.

El Orfeón, la Filarmónica de Múnich y Gergiev repetirán en la capital francesa la Octava de Mahler que tanto éxito alcanzó el 13 de octubre del pasado año en Múnich en el concierto con el que la orquesta celebró su 125 aniversario. En esta ocasión, el cuadro de solistas estará compuesto por las sopranos Simone Schneider Jacquelyn Wagner y Regula Mühlemann, las altos Claudia Mahnke y Katharina Magiera, más el tenor Simon O'Neill, el barítono Michael Nagy y el bajo Evgeny Nikitin. El concierto será retransmitido por Mezzo tv y por Radio France Musique.

Esta sinfonía fue estrenada mundialmente por la Filarmónica de Múnich bajo la dirección del propio compositor Mahler y no se programa habitualmente en los circuitos musicales porque requiere un potente efectivo de instrumentos y de voces en el escenario. No en vano se le denomina la “Sinfonía de los mil”. Para el Orfeón también es una partitura especial, ya que el coro tuvo la fortuna de estrenarla en España, en el XIX Festival de Granada de 1970, bajo la batuta de Rafael Frühbeck de Burgos, con la Orquesta Nacional de España.

El programa de los conciertos de los días 20 y 21 de febrero en la Philharmonie será el Réquiem de Berlioz. En el escenario, la Orquesta de París y su coro, más la Orquesta del Conservatorio de París, el Orfeón y el tenor estadounidense Bryan Hymel como solista, todos ellos bajo la batuta de Pablo Heras-Casado (Granada, 1977). Será la primera vez que los orfeonistas son dirigidos por este joven director, cuya carrera profesional se ha catapultado en la última década. En 2011 debutó con la Filarmónica de Berlín; en 2016 se puso al frente de la Filarmónica de Viena, y ese mismo año celebró dirigiendo en el Carnegie Hall los 125 años de la prestigiosa sala. Ha recorrido el mundo de orquesta en orquesta.

Precisamente con el Réquiem de Berlioz el Orfeón y la Orquesta Nacional del Capitolio de Toulouse inauguraron este auditorio situado en la “Cité de la Musique”. La obra requiere un numeroso efectivo de músicos y cantores. Berlioz la denominó “Grand messe des morts” y en su estreno, el 5 de diciembre de 1837 en la iglesia de San Luis de los Inválidos de París, Intervinieron 400 instrumentistas y coralistas.

En el Festival de Berlioz

El 31 de agosto, el Orfeón volverá a interpretar el Réquiem de Berlioz en el festival dedicado a este compositor francés en La Côte Saint-André, ciudad natal de Berlioz que celebra el 150 aniversario de su fallecimeinto. Será con la Orquesta Nacional del Capitolio de Toulouse y su titular Tugan Sokhiev.

Este festival suele reunir a finales de agosto alrededor de 50 actividades en torno a las obras fundamentales del repertorio románico, la mayoría de ellas en el patio del castillo de Luis XI a las que acuden en torno a los 20.000 espectadores.

Con la Orquesta Reino de Aragón

El 28 de febrero el Orfeón, junto a la Orquesta Reino de Aragón, participará en la temporada de grandes conciertos de primavera del Auditorio de Zaragoza que este año cumple su edición número 25. Ambas formaciones musicales interpretarán la Sinfonía nº 2 de Mahler bajo la dirección de Iñigo Pírfano y con las solistas Carmen Solís (soprano) y María José Montiel (mezzosoprano).

El mismo programa y los mismos intérpretes ofrecerán la Segunda de Mahler al día siguiente en el Kursaal de Donostia, un concierto solidario del Colegio Mayor Ayete a favor de Cáritas que se repetirá en el Auditorio Baluarte de Pamplona y cuyos fondos irán a la Fundación Core.

Mahler tardó seis años en componer esta sinfonía, también conocida como “Resurrección”. Fue interpretada por primera vez de forma íntegra por la Filarmónica de Berlín con  coro y solistas el 13 de diciembre de 1895 en la capital alemana. La intervención del coro, aunque  breve, requiere dominar los pianísimos, los crescendos y los fortes, algo a lo que los orfeonistas están habituados y que llamó la atención del ya desaparecido maestro Abbado en el primer contacto que estableció con el coro, con esta obra en 1997. Luego vendría la versión del Festival de Lucerna (2003) conducida por el director italiano y otras más, como la de Simon Rattle en el Festival de Canarias (2007), las de Paavo Järvi (2006 en París y 2009 en Frankfurt) o la de Michael Tilson Thomas en Madrid (2011).   

Íñigo Pirfano (Bilbao, 1973) ha trabajado como director invitado en Europa y Latinoamérica, con orquestas como la Sinfónica de Hamburgo, Filarmónica de Szczecin, Sinfónica de Bratislava, Sinfónica de Euskadi, Sinfónica de Bilbao, Sinfónica de Castilla y León, Sinfónica de Navarra, Sinfónica Nacional de Colombia, Sinfónica Nacional de Perú, Sinfónica de Guayaquil, Sinfónica Nacional de Panamá, etc. En 2002 realizó su debut operístico con una producción de El retablo de Maese Pedro de Manuel de Falla, muy alabada por la crítica y el público.

Gira con la Orquesta de la Ópera de Praga

En noviembre, el coro se desplazará al Auditori de Barcelona y al Auditorio Nacional de Madrid para interpretar la Novena de Beethoven junto a la Orquesta de la Ópera de Praga y bajo la dirección de Karl-Henz Steffens.

Karl-Heinz Steffens (Tréveris, Alemania, 1961) clarinetista de formación y profesor de música, tras alcanzar una de las máximas cimas para un instrumentista -el puesto de principal en la Filarmónica de Berlín- decidió dar el salto a la dirección de orquesta. En ese tiempo ha acumulado un notable bagaje, tanto en el panorama orquestal como en el operístico.

Los conciertos “en casa”

El coro participará en la próxima edición de la Quincena con tres conciertos de los que la propia organización avanzó que uno de ellos será con la Orquesta de París y Daniel Harding en el pódium de la dirección.

Pero antes de este festival, el 7 de marzo se unirán las voces del Orfeón más las del Orfeoi Txiki a la Joven Orquesta Gustav Mahler para interpretar en el Kursaal la Sinfonía nº 3 de Mahler con el director británico Jonathan Nott. El concierto se inscribe en la programación de Kursaal Eszena.

Jonathan Nott  (Solihull, Inglaterra, 1962) se ha convertido en los últimos años en un reputado mahleriano, tras grabar para el sello Tudor todas sus sinfonías a excepción de la Décima. Le entusiasman especialmente las orquestas de jóvenes, como la Junge Deutsche Philharmonie de la que es titular. En Bamberg fundó el premio Gustav Mahler para jóvenes directores. Ha sido desde  2000 el director principal de la Bamberg Symphony Orchestra, director musical de la Tokyo Symphony Orchestra (desde 2014) y principal director y de la Junge Deutsche Philharmonie (desde 2014). En 2017 fue nombrado nuevo director de la Suisse Romande.